jueves, 10 de diciembre de 2009

Maldito puente

Y la rutina me arrastra tan lejos de ti… Mi pequeña, inmensa desconocida… Con tus calles interminables, tus recovecos insondables, tus callejones poco recomendables y tus avenidas de ensueño… Tus oportunidades. Tus desechos. Mis fracasos. Mi convicción

Una ciudad que lo mismo te golpea que te arrulla con ternura, te ilumina los ojos con sus calles repletas de destellos, pacientes, quietos… Cálidos.

Que te permite ser sombra difusa y estrella fulgurante, anónima en tan hermosa desdicha… Fiera aciaga que rompe aceras y desgarra vestiduras buscando un poco de corazón…

Madrid te extraño, me extraño… Y de repente, adoro los domingos.


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No tenia que haberme ido de viaje, ahora quisiera no haberme tenido que volver...